Desde los pétalos que despiertan con la brisa de la mañana hasta el racimo maduro que abraza el sol al final del verano, la vid es mucho más que una planta.
Es testigo del paso del tiempo, custodio de tradiciones y puente entre la tierra y la copa. En Viladellops, esta naturaleza viva late con fuerza.
Hoy te invito a recorrer su historia, su cultivo y el modo en que puedes llevarte un pedazo de este patrimonio directo a tu mesa.
¿Qué es la vid?
La vid (Vitis vinifera) es una planta leñosa que pertenece a la familia de las vitáceas.
Se caracteriza por un sistema de raíces robusto, troncos leñosos que sobreviven año tras año, sarmientos que brotan cada primavera, hojas compuestas y racimos de uva.
Gracias a su flexibilidad genética, ha permitido múltiples variedades que expresan terroirs muy distintos: algunas más blancas, otras más tintas, algunas aromáticas, otras más estructuradas.
En entornos mediterráneos, como el Penedès, la vid aprovecha los veranos secos, los inviernos moderados y los suelos calizos para desarrollar aromas minerales, elegancia y frescura.
Origen e historia de la vid
Los primeros registros arqueológicos sitúan la viticultura en Oriente Medio hace más de 6.000 años. Civilizaciones como la sumeria y la fenicia ya cultivaban vides y comerciaban con vino.
Desde allí, la vid se expandió hacia Egipto, Grecia y Roma, donde el vino se convirtió en elemento clave de cultura, economía y rituales.
En la Península Ibérica, los romanos consolidaron viñedos en toda la cuenca mediterránea. Con el paso del tiempo, esa tradición se adaptó a microclimas locales, generando castas autóctonas.
En Viladellops, se sabe que ya existía población hacia el año 930 vinculada al castillo de Olèrdola. La bodega produce vino desde 1877.
En la década de 1990, la finca se moderniza y en 1999 comienza un nuevo proyecto vitivinícola con identidad mediterránea y local.
Partes y características de la vid
Raíz
Las raíces se hunden profundamente, sujetan la planta y absorben agua y minerales del suelo. Incluso en periodos secos, la vid explora capas profundas para sobrevivir.
Tronco y sarmientos
El tronco es la estructura leñosa permanente. Cada año brotan los sarmientos jóvenes que llevarán hojas, flores y uvas.
Hojas y flores
Las hojas captan luz para la fotosíntesis. Las flores, agrupadas en racimos, son el punto de partida de la fruta una vez polinizadas.
Racimos y uvas
Los racimos atraviesan varias fases: crecimiento, envero y maduración. En cada etapa se concentran azúcares, ácidos, compuestos aromáticos y taninos.
En Viladellops, estas partes interactúan con un suelo calizo, pobre en nutrientes y con fósiles marinos, lo que aporta carácter mineral a las uvas.
El ciclo anual de la vid
Brotación
Con el calor de la primavera, las yemas se activan y aparecen los primeros brotes verdes.
Floración
En racimos, las flores se abren y se polinizan. Si el clima acompaña, la cuaja será óptima y dará racimos equilibrados.
Envero
Las bayas cambian de color: las blancas se tornan doradas y las tintas adquieren tonos rojos y azulados. En esta fase, el azúcar empieza a acumularse.
Maduración y vendimia
Las uvas completan su maduración. Azúcares, acidez y aromas se equilibran hasta encontrar el punto ideal de vendimia según el estilo del vino buscado.
Cultivo de la vid en el Penedès y en Viladellops
El cultivo define el carácter del viñedo. En Viladellops se combinan técnicas tradicionales heredadas con agricultura ecológica certificada.
La finca se sitúa a unos 250 metros sobre el nivel del mar. Sus suelos arcillo-calcáreos con fósiles marinos y el macizo del Garraf generan un microclima único: brisas marinas y temperaturas mediterráneas.
Las variedades protagonistas son el Xarel·lo en blancos y la Garnacha en tintos. A veces se acompaña de Syrah en ciertos coupages. Hoy, 60 hectáreas de viñedo rodean un entorno protegido de bosque mediterráneo.
Viladellops: un “wine village” con alma y tienda online
Viladellops es mucho más que una bodega. Es un conjunto de masías restauradas, arquitectura rural preservada y patrimonio cultural como la torre medieval del s. XI y la ermita románica del s. XIII.
La finca está certificada como agricultura ecológica por el Consejo Catalán de Producción Agraria Ecológica. Su filosofía es clara: respeto al suelo, al paisaje y a la tradición.
En su tienda online encontrarás vinos como:
- Viladellops Xarel·lo, fresco y mineral.
- Viladellops Garnacha, tinto mediterráneo con identidad.
- Turó de les Abelles, vino prémium que refleja la finca.
- L.D. Ancestral y Parany, producciones limitadas que expresan exclusividad.
También puedes reservar experiencias: catas premium, rutas históricas, visitas entre viñedos en 4×4 o alojamiento en sus masías restauradas.
Tu copa Viladellops: del viñedo a tu hogar
Cierra los ojos. Imagina descorchar una botella de Xarel·lo cultivado aquí. Notas minerales, recuerdos de tomillo y un leve soplo salino en boca.
Ese vino es más que una bebida: es suelo, clima y cultura. Es historia hecha líquido.
Explora la tienda online de Viladellops y elige el vino que te hable. Vive una experiencia enoturística y siente el viñedo con tus propios sentidos.
Brindar con Viladellops es mucho más que beber vino. Es regalar memoria de la tierra, tradición mediterránea y sostenibilidad en cada copa.
Referencias

Responsable de la Finca Viladellops, Marcelo representa la nueva generación de una familia dedicada a interpretar el paisaje del Garraf a través de vinos ecológicos y honestos. Su trabajo se centra en el respeto por la tierra y la expresión pura de las variedades autóctonas.
